Para emprender un viaje largo por carretera es necesario tomar una serie de precauciones:

  1. Recorras la distancia que recorras es fundamental tener el coche en perfectas condiciones. Antes de salir de vacaciones lleva tu coche a revisión para evitar que puedan surgir problemas en la carretera.
  2. Estar descansado. Encontrarse en un buen estado a la hora de salir de ruta facilita la conducción. Si uno va cansado, la presión de episodios como la que se genera en los atascos o moverse por un entorno que no resulta familiar puede contribuir al nerviosismo en el conductor. Igualmente, unos pasajeros cansados también pueden alterar el ambiente en el coche.
  3. La importancia del equipaje. Llevar lo justo permitirá no saturar el espacio en el coche y no añadir posibles distracciones. Por ejemplo, se puede dar el caso en el que llevando una sombrilla de la playa esta afecte a la visibilidad en la parte trasera del vehículo.
  4. Investigar la ruta. Conducir por un entorno previamente investigado aunque no hayamos estado nunca antes puede facilitar el trayecto y proporcionarnos una tranquilidad que quite tensiones añadidas y reduzca el posible estrés.
  5. Conducir por tramos. Todas las instituciones relacionadas con la seguridad vial recomiendan que los viajes largos se hagan alternando turnos de conducción. De este modo el conductor puede descansar y la capacidad de concentración aumenta.
  6. Comprobar la puesta a punto del coche. Antes de salir es altamente recomendable comprobar el nivel de los líquidos, los frenos y los neumáticos.